Un extraordinario recurso de utilidad para aprobar oposiciones
Uno de los recursos menos utilizados, en su máxima extensión, es el referido a los exámenes de oposiciones años anteriores. ¿Por qué? Muy sencillo, en primer lugar porque es complicado encontrar todos los exámenes de convocatorias anteriores y buscarlos lleva bastante tiempo, horas y horas de búsqueda en Internet que deberías estar empleando en estudiar. En segundo lugar, porque no todas las administraciones publican los exámenes completos. En muchas ocasiones solo encuentras la plantilla de respuestas, pero no las preguntas; incluso es habitual que los opositores no puedan llevarse el examen al finalizarlo. Y, como mucho, solo puedan apuntar las respuestas que entregaron, para luego cotejarlas con la plantilla de respuestas que publican en la sede electrónica del organismo convocante.Pero hay alternativas ante esta situación, como por ejemplo en el portal web examenes-oposiciones.com, donde semana tras semana, día tras día, se van incorporando nuevos exámenes oficiales de oposiciones de todas las disciplinas: auxiliar administrativo, enfermera, celador, ingenierías, auxiliar de bibliotecas… Y donde puedes descargar tanto las plantillas de preguntas como las de respuestas en pdf; y, además, en muchos casos, realizar el examen de forma interactiva, lo que sin duda es una gran ventaja pues desde tu smartphone o desde tu ordenador puedes hacer el examen on line y ver los resultados de forma inmediata. Saber si has acertado o has errado en la respuesta.
¿Por qué hacer y estudiar los test de examen de convocatorias pasadas?
Muy sencillo, porque los Tribunales que confeccionan los exámenes son los primeros en consultar esta fuente inagotable de preguntas. Componer un examen de un total de cien, cincuenta o más cuestiones concretas y sucintas, entendibles y correctas para una oposición no es una tarea sencilla. Ponte en su lugar. Máxime cuando se trata de un examen tipo test donde hay que incorporar tres o cuatro alternativas en las respuestas. Y solo una debe ser la correcta. Pero que, además cuenten con un nivel aceptable para que no las acierte todo el mundo; y que representen las tareas a realizar en el futuro puesto de trabajo. Aunque esta máxima no se suele producir y en muchos casos te encuentras con preguntas que poco o nada tienen que ver con la convocatoria. Ejemplos hay muchos: exámenes para auxiliar de biblioteca que parecen que buscan auxiliares administrativos. Como se puede ver en la web antes referida.
Por otra parte, todas las preguntas que se deben plantear tienen que ser válidas, que formen parte del temario, y que estén actualizadas, sobre todo en lo que respecta a la legislación vigente, tan cambiante siempre. Todo ello es un hándicap para aquellos empleados públicos que se ven en la tesitura de presentar un buen número de preguntas al Presidente del Tribunal. Normalmente, cada miembro o vocal que compone ese equipo de trabajo se ve en la obligación de presentar cientos de preguntas, de las cuales solo un centenar, o cincuenta, según cada caso y según el criterio de la persona responsable final, serán las que compongan el examen al que te vas a enfrentar.
Finalmente, mientras realizas los exámenes de convocatorias pasadas te estás beneficiando de una manera doble. De un lado, en realidad, estás estudiando ya que mientras respondes a las preguntas de los test estás aprovechando el tiempo y preparando a tu cerebro ante la prueba que, más tarde o más temprano, vas a enfrentar. De otra parte, muchas de esas preguntas que vas respondiendo te abren otros horizontes a partes del temario que quizá, no tengas entre tu material de estudio, porque en la academia no lo han contemplado o, si estás preparando el proceso por tu cuenta, había pasado inadvertidas para ti.
También hay que tener en cuenta que una pregunta mal planteada por parte del Tribunal correspondiente puede llevar a su posterior impugnación, por lo que, en muchos casos, las preguntas de una convocatoria a otra, de una administración a otra, se suelen repetir, para no cometer errores que perjudiquen a los propios miembros de cada Tribunal, que es escogido entre los propios funcionarios de igual o superior categoría a la que como futuro funcionario te vas a presentar. Vamos, que van a ser tus compañeros, o tus jefes, cuando superes todas las pruebas con nota suficiente como para ganar la plaza deseada, y que tanto esfuerzo cuesta.
Sin duda, este es un buen momento para preparar oposiciones. Después de muchos años en los que las convocatorias han estado ‘congeladas’, por pura necesidad presupuestaria, las administraciones se están viendo obligadas a renovar las diferentes plantillas: por jubilación, o por mejora en los servicios, por citar algún ejemplo. Por ello, por tratarse de un buen momento es recomendable tener en cuenta todos los factores que llevan al éxito y, uno de ellos, no cabe duda, es saber qué ocurrió en convocatorias pasadas.
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