Compasión
Lunes 29 de agosto. Llevaban tres días de viaje, no, de éxodo, de lo que fuera. Desde el incidente de la caseta no habían vuelto a interactuar con ningún otro zombi. Se habían topado con varios, pero de una forma u otra habían logrado evitar los enfrentamientos directos. Padre e hija caminaban en silencio, atentos a su alrededor. Las pocas veces que se habían permitido el lujo de relajarse e inten...