Cercanias de verano.
En el calor del mediodia el aire es todo de jazmines. Por encima de la medianera me guiñan las rosas rojas de un vecino o se derraman voluptuosas las blancas de otro. Hasta los alisos con sus flores breves regalan a nuestro paso aromas felices. Es una tarde de domingo como otras, silenciosa y somnolienta. Hasta los pajaros se han quedado silenciosos, tal vez con temor de despertar a la tormenta. L...